El Gobierno ha dado luz verde al Anteproyecto de Ley que introduce cambios clave en la regulación laboral, destacando la reducción progresiva de la jornada máxima a 37,5 horas semanales y la obligatoriedad del registro de jornada con mayores garantías de control.
Registro de jornada: requisitos y sanciones
El nuevo marco normativo impone a las empresas la obligación de llevar un registro horario detallado y accesible, cumpliendo los siguientes criterios:
- Registro digital obligatorio con acceso inmediato.
- Gestión personal y directa por parte del trabajador.
- Garantía de autenticidad y trazabilidad de los datos registrados.
- Conservación de registros durante cuatro años.
- Disponibilidad para inspecciones y representación sindical.
El incumplimiento de estas obligaciones conllevará sanciones económicas, que podrán oscilar entre 1.000 y 10.000 euros por trabajador afectado, dependiendo de la gravedad de la infracción.
Reducción progresiva de la jornada laboral
Con el objetivo de mejorar la conciliación laboral y la productividad, la normativa establece la reducción paulatina de la jornada laboral máxima hasta las 37,5 horas semanales en cómputo anual. Este cambio será especialmente relevante para aquellos trabajadores no cubiertos por convenios colectivos, quienes hasta ahora podían verse sometidos a jornadas más largas sin una regulación clara.
Refuerzo del derecho a la desconexión digital
Los empleados tendrán garantizado el derecho a desconectar fuera de su horario laboral, sin que ello implique represalias o consecuencias laborales. Las empresas deberán adoptar medidas para asegurar el respeto a esta normativa.
Plazo de adaptación para convenios colectivos
Los convenios colectivos deberán ajustarse a la nueva regulación antes del 31 de diciembre de 2025. Durante este periodo de transición, se habilitarán mesas de diálogo social para evaluar la implementación de las medidas y garantizar su cumplimiento efectivo.
Este paquete de reformas busca mejorar las condiciones laborales, garantizando mayor transparencia en la jornada de trabajo y reforzando los derechos de los empleados, con sanciones más estrictas para las empresas que no se ajusten a la normativa.
Las empresas que deseen adaptarse a las exigencias normativas sin incurrir en costes adicionales pueden aprovechar iniciativas como la ofrecida por Consulting Normativo, que permite la digitalización gratuita del control horario hasta finales de 2025. Esta opción facilita la transición a un sistema moderno y eficiente sin asumir gastos inmediatos, garantizando así el cumplimiento legal de forma sencilla y asequible.
